«Las cualidades de un jugador que prefiero, son las de ser buenos compañeros. No quiero jugadores que piensen qué puede hacer el equipo para ellos sino al revés«
Pep Guardiola en su presentación como Entrenador del Manchester City, Julio de 2016.
Llevando este concepto de “Ser Buen Compañero” a los Equipos de Trabajo podemos considerar que la conducta que tengan las personas que lo conforman marcará la diferencia entre considerarse como tal o ser simplemente un grupo de personas que realizan tareas en un ambiente laboral, por lo que es importante que cada uno asuma con responsabilidad sus propias acciones, ya que impactarán directamente en el funcionamiento del conjunto.
Entendemos que el Equipo de Trabajo, motor principal para el desarrollo de cualquier actividad dentro de una Organización, no es solamente una suma de voluntades, sino también de valores que nos identifica y que surge de una construcción colectiva que nace desde lo personal y converge en lo grupal.
Sus resultados pueden estar muy cercanos a la excelencia elevando exponencialmente la propia capacidad de crear soluciones productivas desde la retroalimentación constante entre “saberes” y “aprenderes” de sus partes, considerando la INTEGRACION de las diferencias que puedan manifestarse.
Un elemento fundamental para formar un Equipo de Trabajo es la CONFIANZA entre sus miembros, incentivando el reconocimiento equilibrado y objetivo tanto de los logros como de lo que llamamos “espacios de aprendizaje” (comúnmente denominados “errores”) que permitirán potenciar talentos y habilidades y afrontar los conflictos de manera mas efectiva, en un continuo progreso compartido.
Otro componente relevante es el COMPROMISO de los integrantes del Equipo de COLABORAR activamente lo cual implica estar atentos a uno y al otro, brindar y recibir ayuda, acompañar en los inconvenientes y, en definitiva, participar de lo que nos sucede desde el RESPETO y un genuino interés.
Integridad, Confianza, Compromiso, Cooperación y el Respeto no son simples palabras, son valores que, reflejados en las acciones responsables de quienes conforman un Equipo de Trabajo derivan en muchos beneficios y resultados mas cercanos a la excelencia que los que se puedan alcanzar desde lo individual. Quienes puedan vivirlos lograrán con su aporte cotidiano, aumentar el desempeño del equipo y enriquecerse en lo personal, laboral y profesional.
- Me considero parte de un Equipo de Trabajo?
- Qué aporte realizo cotidianamente al Equipo?
- Que nos falta para transformarnos en un Equipo de Trabajo o desarrollarnos como tal?
- Podemos practicar el Reconocimiento con nuestro Equipo de Trabajo?
- Como nos paramos frente a los “errores” o a “fracasos” particulares o grupales?
Fernanda Estevao Díaz
Miriam Ottollini
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